ACTUALIDAD

1.- Las últimas elecciones sindicales cuyos datos fueron recogidos de manera pública por la Administración y que fueron presentados por Martín Sevilla Jiménez, Conseller de Trabajo y Asuntos Sociales de aquel entonces, se remontan a 1990. Comprendían los comicios celebrados entre 15 de septiembre y 15 de diciembre de aquel año.

El total de los representantes electos fue de 26.656 de los que 13.137 (un 49,28%) correspondieron a UGT; 10.426 (un 39,11%) a CCOO; 618 al Sindicato Independiente; 412 a la CSI- CSIF; 354 a USO; 190 a CGT y 657 a no afiliados con 862 más de otras organizaciones minoritarias.

La suma de UGT más CCOO amojaba la cifra del 88,39% del total, absolutamente insultante y que, de acuerdo con la mal llamada Ley Orgánica de Libertad Sindical, sentenciaba el bisindicalismo en nuestra Comunidad.

2.- Las cifras actuales no permiten grandes dosis de esperanza aunque los “mayoritarios” ya han alcanzado su techo.

De los 33.445 representantes certificados por la Dirección General de Trabajo y Salud Laboral a fecha 31 de diciembre de 2005, 13.815 son de CCOO, hoy mayoritaria (41,31 %); 13.475 de UGT, segunda y en retroceso (40,29%); el Sindicato Independiente, a mucha distancia, con 1.152 representantes y un 3,44%; CSI-CSIF, 764 y un 2,28 %; USO, 688 y un 2,06% CGT 575 y un 1,63%.

CCOO-UGT ha descendido al 41,60% perdiendo casi ocho puntos porcentuales sin que, por el contrario, el terceto SI+CSI-CSIF+USO haya subido más allá del 7,78%, cifra insignificante frente al 10% que exige la LOLS para organizaciones nacionales o el 15% para las de ámbito regional.

Sí es verdad que anteriormente tan sólo alcanzaban el 5,20% del total pero el incremento en más de veinticinco años es irrelevante.

3.- La discusión del Estatuto de Autonomía de nuestra Comunidad ha pivotado sobre la necesidad de eliminar el listón del 5% de votos que el antiguo Artículo 12. Dos imponía para obtener escaños y entrar en el Parlamento.

Salvo el PP, todos los demás partidos, parlamentarios o no, y las organizaciones sindicales (CCOO, UGT) reclamaban su rebaja al 3%. Aducían razones de mayor democracia y pluralismo político.

4.- Por extrañas circunstancias, no declaradas, pese a la petición del Sindicato Independiente en sentido contrario, ni los partidos políticos de izquierda ni los sindicatos reseñados han clamado por situar el mismo nivel entre los sindicatos y los partidos políticos.

Prefieren mantener el bisindicalismo en un claro ejercicio de incongruencia y vulneración de la libertad.

5.- Este Primero de Mayo es buen momento para exigir que políticos y sindicalistas sean medidos por el mismo rasero: a todos el 5% o el 3%, si así se decidiera en Ley Electoral de desarrollo. Habrá mayor democracia y pluralismo sindical.

Lo contrario es partidismo vacío que inhabilita a sus actores para ninguna petición.

Fermín Palacios Cortés

Secretario General del Sindicato Independiente (C.V.)