DOS + DOS = UNO O NINGUNO
Si Pitágoras levantara la cabeza volvería a su tumba sonrojado ya que, tantos años después, los políticos no han aprendido nada. De números, menos.
Con algún periódico de Madrid, que se lea en todo el país, la vergüenza es mayor. Se guía por una doble vara de medir que como la goma se estira o se encoge según los contados sean de su cuerda o de la ajena.
Supongamos que la calle la toman las izquierdas: los “nunca mais”, los juglares y titiriteros, los pacifistas que a bofetadas predican el no a la guerra o los terroristas que impetran el proceso de paz: cada manifestante se multiplica por sí mismo hasta el infinito. Polanco hace ver lo que el ojo humano no vio ni las circunvoluciones cerebrales contaron.
Por el contrario si la calle empieza a poblarse de gente de bien (de derechas o incluso de centro) y el objeto es la crítica al poder ilegal, ilícito e inmoral, los “cuentacuentos”, deprisa, deprisa, reducen a la nada su presencia y, además, dan números exactos hasta la nula unidad.
Jesús de Polanco, Juan Luis Cebrián, Jesús Ceberio, Pedro García Guillén, Javier Moreno y sus acólitos desconocen a Pitágoras y los números. No saben sumar. Tan sólo restar o dividir. Jorge A. Rodríguez sabe, además, hacer el ridículo. “El País” dio 119.661 asistentes a la “mani” contra ETA; Delegación de Zapatero se estiro hasta los 129.715. ¿y el otro millón que pobló el sábado Madrid?.
Fermín Palacios Cortés