LA HISTORIA Y LA MEMORIA: LOSA DEL OBISPO
Para algunos el último parte de guerra (En el día de hoy, cautivo y desarmado el Ejercito rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado) no pudo ser asimilado.
Y continuaron la guerra por otros medios hasta, al menos, 1951 en que los “guerrilleros” del PCE abandonaron el Valle de Arán. Muchos de los que se habían enrolado en la operación “Reconquista de España” de 1944 no regresarían a sus bases jamás: fueron asesinados por sus propios compañeros de partido, abatidos en numerosos enfrentamientos con la Guardia Civil o ajusticiados tras haber sido apresados.
Un ejercicio de memoria nos lleva al 26 de enero de 1947 (sesenta años atrás) en que unos cuarenta “bandoleros” (según unos) o “guerrilleros” (según otros) se personan en Losa del Obispo (691 vecinos en el censo de 1940 y decayendo progresivamente hasta los 431 de hoy) a la llamada de los tres hermanos Gómez Corrales y de Roca Yuste que exigían venganza contra el mal trato a uno de ellos.
El balance fue desolador. La “Tropa” de Florián García “Grande” y Francisco Corredor “Pepito el Gafas” comete nueve asesinatos: Jesús Hernández, Pedro Rodrigo, F. Jorge Mocholi, Bienvenido Pérez, Narciso Poza, Norberto Poza, el guardia civil Ezequiel Cervera y la mujer e hijo menor del comandante del puesto (cabo) Rafael Borrego.
Así mismo hirieron a diez y siete personas más, entre ellas y gravemente, al cabo-comandante y a su hijo (catorce años) Rafael Borrego Gonzálvo que fallecería el 14/7/00 con la medalla de sufrimientos por la Patria y dentro del Sindicato Independiente de la Comunidad Valenciana. El crío tuvo que ver el asesinato de su hermano y, más grave, la terrorífica muerte de su madre tras cuatro horas de ocupación del pueblo por los chicos del “Grande”.
Además -el actual alcalde de Losa del Obispo (Benjamín Miguel Aparicio Cervera) puede certificarlo- dos “héroes” de la mesnada del maquis obligaron a su padre a acompañarle casa por casa (de las señaladas por los hermanos Gómez Corrales) para robar todo lo que encontraron y les era de alguna utilidad.
Hoy se cumplen sesenta años de aquel luctuoso acontecimiento en que Francisco Mariano “Chatillo de Sisantes”, Francisco Jurado “Cojonudo”, “el Grande”, “Pepito el Gafas” y Antonio Gan “Cubano” cometieron nueve asesinatos.
Aunque algunos historiadores (con envidiable desacierto y falta a la verdad) nos han dejado su historia de aquellos luctuosos acontecimientos, me veo en la obligación de dejar constancia escrita de la memoria que me trasmitió Rafael Borrego, cuyo recuerdo le persiguió toda su vida.
Lamentablemente la Guerra Civil no acabó con el parte de Franco. El PCE la prolongó hasta 1951 y justificó los asesinatos como “acciones de guerra”.
Hoy, ahora, la palabra es muy sufrida, unos hablan de “héroes” y otros de “asesinos”. Que el cielo les juzgue.
Fermín Palacios Cortés
Secretario General del S.I-C.V.T