GIGANTES Y CABEZUDOS
“El consenso lo ha roto alguien que se cree que el mundo empieza con él”, La frase, de Rajoy, la pronunció el pasado 16 de febrero en el encuentro que el Partido Popular programó en el Polideportivo “El Cabañal” para hacer la presentación de los candidatos a alcaldes populares de Valencia, Alicante y Castellón.
Nada más cerca de la realidad. Las continuas agresiones de Zapatero a la pacifica vida cotidiana soliviantando de manera gratuita una convivencia que quedó refrendada el 6 de diciembre de 1978, no tienen fin.
La penúltima (-siempre se le ocurrirá otra contra los españoles en general y contra los valencianos en particular-) haciendo causa común con los asesinos etarras y cruzando la raya de la decencia y la legalidad. Y embarcando, además, en el crucero de la ignominia a todo un partido político que mayoritariamente (las encuestas, que han sido publicadas recientemente en este diario, cuentan y cuestan) está contra su decisión.
El nuevo Mesías, caudillo de la nada, en lugar de abandonar las aguas revueltas que llevan al Triangulo de las Bermudas encara directamente la catástrofe, con las orejeras puestas y sin ánimo de rectificar el rumbo.
Ignaci Plá, aterrado, asiste a su propia destrucción porque en este juego lamentable nada puede hacer “la giganta” ante la persistente machaconería del “cabezudo”( mejor, cabezón) que quiere sobremorir en la Moncloa. A costa de barbaridades. No vote socialista. Las próximas elecciones del 27 de mayo ratificarán estas gravísimas equivocaciones.
Fermín Palacios