“NO SABE USTED QUIÉN SOY YO”
La frase paradigmática de quien hace befa y mofa de la Ley. Utilizada durante décadas para intimidar al contrario, asustar al pusilánime y hacer ceder al genuflexo con el poder.
Quienes se han apoyado en esas palabras obtenían –en muchas ocasiones- licencia para casi todo: Para dejar impunes infracciones, abusos, faltas e incluso delitos. Y, encima, si al lado iban los corifeos de turno, crecía su autoestima por encima del resto de los mortales con lo que el “quién soy yo” salía a todas horas.
Es, por ejemplo, lo que ocurrió no hace demasiado tiempo con uno de los hijos del “tandem” Segundo Bru- Clementina Ródenas, presuntamente cegado por el alcohol, en su relación poco fluida con la policía local, en un lugar que seguro habría cerrado la Ministra de la Ley Seca.
Es también, más grave todavía, ya que no tiene la disculpa de la juventud, de la inmadurez o del complejo de inferioridad que provoca una incapacidad transitoria, lo ocurrido a lo largo de estas Fallas con el PSPV en la calle Blanquerías con los iconos de Pla y Albors en permanente vulneración de normas administrativa
La chulería considerada como una de las bellas artes se impone vulnerando las normas más cívicas y haciendo de los socialistas un modelo para no armar ni construir.
¿Puede extrañar que estas Fallas hayan sido un cúmulo de orines, vómitos y golfería, con un PSPV que da (mal) ejemplo de insumisión?.
Fermín Palacios