LA VUELTA DE TEQUILA
Entre 1977 y 1982 el grupo “Tequila”, integrado –entre otros- por Ariel Rot, Alejo Stivel y Felipe Lipe, hoy vivos y los desaparecidos Manolo Iglesias y José García, alcanzó la gloria con canciones para adolescentes.
Editaron varios LPs que se vendieron como churros: “Matrícula de Honor”, “Rock and Roll”, “Viva Tequila” y “Confidencial”; el fenómeno de los “fans” reapareció como en la época del “Dúo Dinámico”. Como siempre, sin embargo, los juegos con las drogas terminaron con el grupo.
Fue la época en las que aquellas canciones inolvidables, de los que “Salta”, “Necesito un Trago”, “Dime que me Quieres”,”Quiero besarte” o “Rock and Roll en la plaza del pueblo” fueron paradigma, se bailaban en todas las verbenas, ciertos y conciertos.
Se cantaba a la inocencia, a una edad inmadura, al mantenimiento a ultranza del complejo de Peter Pan.
Los socialistas hicieron de una de las canciones emblema en el periodo electoral: “Que el tiempo no te cambie”, abogando por la parte más simplista y negativa de la misma. Un estribillo contra el desarrollo de la personalidad y contra la madurez.
Hoy nos dicen que Ariel Rot, tras pasar por “Los Rodríguez”, quiere volver a resucitar Tequila y las viejas canciones. Sin embargo “nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos”. Ya no queremos música de adolescentes y políticos anclados en la infancia. Preferimos que Zapatero y sus “fans” canten, en todo caso, “Ya soy mayor” (“Y aunque un niño yo siempre quiero ser tengo que pensar que ahora soy mayor…”) y se pongan a la tarea. Menos juegos de azar y travesuras. Menos ocurrencias. Segunda oportunidad.
Fermín Palacios