A LA VEJEZ, VIRUELAS
La posición de los “sindicatos mayoritarios” CCOO PV y UGT PV no se sostiene ni con papel de fumar. Mantener una manifestación el día 31 ante la Generalitat Valenciana y la patronal CIERVAL olvidándose del Gobierno de España (Delegación de Gobierno), de los Juzgados de lo Mercantil y, sobre todo, de la comparecencia ante ellos mismos no es solo una incongruencia. Es sobre todo, autentica mala fe y abuso del derecho.
Como no les va nada en el envite - no en balde Sifre y Recuenco son secretarios generales cesantes – han decidido echarse al monte embarcando a sus organizaciones en la operación. Sin ningún rubor.
En su despropósito olvidan que a lo largo de enero el Consell ha puesto encima de la mesa tres medidas de impacto social importantísimas cuyo costo se eleva a 1.700 millones de euros y que servirá para crear empleo cualificado y de calidad. Y todavía aparecerán otras nuevas.
Lo contrario que el Gobierno Zapatero - indemne en esta disparatada convocatoria – quien además de perjudicar substancialmente a los trabajadores de nuestra Comunidad, por no votarles, recorta substancialmente ayudas y subvenciones para el desempleo con la desvergüenza que les es habitual sin que Ricardo Peralta de la cara ni Jorge Alarte justifique los dislates de su partido.
Que los sindicatos – alimañas entrenadas tan solo para mejorar su voracidad - se comporten de esta manera era predecible y lo venimos anticipando con tiempo suficiente. Lo que no era predecible era el comportamiento tolerante y entreguista de la Generalitat Valenciana.
Es hora de retirar subvenciones, convenios, adjudicaciones, sinecuras y nepotismo a favor de entidades que han hecho de la deslealtad formula para el medro personal.
Así, no.
Fermín Palacios