¡A REFORM – AR!
El Real Decreto-Ley 10/2010, de 16 de junio, de medidas urgentes para la reforma del mercado de trabajo ya está publicado en el BOE y ha entrado en vigor.
Importa poco que luego, en su tramitación como Ley, se deje algún que otro jirón (no de Velasco) por el camino. Que durante estos próximos meses haya una auténtica disfunción y desigualdad de trato entre trabajadores cuyo despido se produzca a partir del día 17 de este mes y los que lo hagan tras la entrada en vigor de la Ley que convalide el Real Decreto-Ley tras los acuerdos transaccionales oportunos.
Zapatero, postrado de hinojos (y con llanto en los ojos) ante Obama y la Unión Europea, que le ha impuesto muy serios deberes y un gran castigo, remolonea e intenta copiar de sus vecinos.
Y como los malos estudiantes, copia mal.
La única salida ("el único camino", que diría Santiago Carrillo Solares, antaño Secretario General del PCE) era reeditar Los Pactos de la Moncloa formalizando un Acuerdo Económico y un Acuerdo Político con todos los partidos del arco parlamentario.
En Octubre (días 8 a 27) del 77 se intentó y se logró. Las firmas de Adolfo Suárez, Felipe González, Joan Reventós, Joseph Mª Triginer, Manuel Fraga, Enrique Tierno, Juan Ajuriaguerra, Miguel Roca, Leopoldo Calvo Sotelo y Santiago Carrillo lo acreditan.
Los Pactos abarcaban todas las materias: política presupuestaría, seguridad social, política monetaria, precios y salarios y empleo.
Para ello se acometía una política de saneamiento económico; una reforma fiscal; un perfeccionamiento del control del gasto público; una política educativa; una política de urbanismo, suelo y vivienda; una reforma de la Seguridad Social; una reforma del sistema financiero; una política agrícola, pesquera y de comercialización; una política energética y estatuto de la empresa pública y, por último, se sentaron las bases de adaptación de las instituciones autonómicas.
Hoy, en cada momento, se ponen parches limitados a cada brecha que aparece. De momento, como nuestro defensa Piqué, en sus partidos con Suiza y Honduras, una tirita por cada uno.
Zapatero también: la tirita de los funcionarios y la del despido de los trabajadores.
Así no ganaremos el campeonato. Hay que enderezar el rumbo.
Fermín Palacios